jueves, 14 de octubre de 2021

Curiosidad

 ¿Qué se la escuela? ¿Qué es la escuela dentro del espacio infinito que es la escuela? ¿Qué es la escuela si no un espacio donde la sensibilidad sea parte de ella? ¿Hacia dónde camina una escuela que olvida a los olvidados y las olvidadas?

Curiosidad. Eso mismo. La escuela es y debe ser un lugar donde se fomente y se escuche la curiosidad.
La curiosidad es conocimiento. Y conocer es la base donde nos plantamos para que no nos sigan pasando por arriba. El olvido no es una opción. Y la memoria siempre será nuestra primera palabra de un diccionario que no está ordenado alfabéticamente sino conscientemente.
Conocer es el puntapié para reconstruirnos, mirando siempre al pasado, con la memoria a flor de piel. Por eso, León Gieco ahí estuvo y está acompañándonos en el aula con sus Cinco siglos igual:
“Desamor desencuentro
Perdón y olvido
Cuerpo con mineral
Pueblos trabajadores
Infancias pobres”
Diversidad. Pueblos originarios, esos que aún resisten el silencio de la historia y el avasallamiento del capitalismo que hace de la tierra un genocidio, mientras ellos hicieron y nos enseñan que la tierra es la Madre.
“Profe, ¿y qué comían?”.
“Cómo se vestían?”.
“¿Cómo tomaban agua?”.
“¿Por dónde caminaban?”.
¿Cuántas manos levantadas? ¿Cuántas veces levantadas? Bueno, ahí permaneció la curiosidad en un segundo grado que crece. Y ahí estábamos, cada une colocando un papelito para armar nuestra Wiphala.
Ahí está la escuela. O al menos esta escuela. O solo quizás esta aula, una donde elegimos que circule la palabra, la música, la escucha y, por supuesto, la curiosidad.