viernes, 2 de septiembre de 2016

El conocimiento como fórmula de salvación

¡Vayan! No duden. Allí está, todos los días en su departamento y yendo al mismo bar. Es uno de los tipos que más sabe del fútbol en el mundo. Fue fuente de consulta de tipos como Johan Cruyff o Pep Guardiola. En su formación pasó por los conceptos de Pedernera. ¡Vayan a buscarlo! No duden. César Luis Menotti aún tiene mucho para darle al fútbol argentino.

Por Lucas Abbruzzese



Desorganización. Sin rumbo. Mensaje atrofiado. Menotti –estamos en los primeros años de los 70- le presentó un proyecto a una AFA que cambiaba de presidente seguido. Tras el Mundial de Alemania 1974, agarró al seleccionado y algo cambió para siempre. Es que el Flaco fue justamente eso: el tipo que quebró para bien la historia. El hombre concepto. Conocimiento puro. Sin embargo, el fútbol, testarudo y que no sabe de lógicas, se adueñó del mensaje del negocio, ese al que no le importa el juego, sino sólo los que ganan.

Fue esa intromisión despojada de lo cultural la que permitió, entre sonrisas y la mal llamada picardía, que, por ejemplo, se intoxicara a un rival con un bidón. El mismo “ingenioso” de ese acto nefasto y cobarde fue elegido Secretario de Deportes por Daniel Scioli. O también coordinador de selecciones juveniles. Carlos Bilardo encarnó durante décadas la visión del poder. Tiempo en el que Menotti la miraba desde afuera.

44 proyectos se le presentaron a la Comisión Regularizadora para llevar a cabo un proceso en las inferiores argentinas. Uno de ellos es de Menotti. ¿Hay alguien mejor que quien más sabe para encarar algo? Quizás un segundo quiebre histórico. El fútbol argentino necesita un cambio radical. Y nada mejor que hacerlo desde los sabios, los maestros, los idóneos.

Por estos días apareció en internet un video de Menotti, en una conferencia de un Congreso de Entrenadores. 1995. 45 minutos. Escucharlo es empaparse de sabiduría:

“Es un deporte invadido por el negocio. Me siento maltratado por la cantidad de mensajes de confusión a un público que pareciera que está perdiendo el buen gusto o la memoria de lo que ha significado el fútbol argentino: un hecho cultural y de expresión.
Un equipo, antes que nada, es una idea y un compromiso y convicciones.
Tenemos que tener cuidado con la soledad del éxito conseguido de cualquier manera.
Lo que hace el modernismo es quitarle al futbolista el placer de jugar.
Un entrenador de fútbol es mucho más que un hombre exitoso que gana cosas. El entrenador de fútbol tiene que tener un enorme compromiso con el espectáculo y la gente.
Antes de empezar a hablar de tácticas, tenemos que hablar de nombres propios.
El sacrificio emociona, pero lo que sensibiliza al hombre es el talento.
El tema pasa por qué dejamos cuando el éxito no nos acompaña”.


https://www.youtube.com/watch?v=q2YCsrybwx8&feature=youtu.be Acá, el link del video. Disfruten. Anoten. Debatan.